Revista mensual de publicación en Internet
Número 53º - Junio 2.004


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La danza como pasión y ejercicio

Por Víctor Pliego de Andrés. Lee su curriculum. 

Compañía Nacional de Danza 2. Arenal. Coreografía de Nacho Duato. Música de María del Mar Bonet. Inside. Coreografía de Chevi Muraday. Música de The Silver Mountzion Orchestra y Larval. L’amoroso. Coreografía de Nacho Duato. Música veneciana y napolitana de los siglos XVI y XVII. Director artístico: Nacho Duato. Director artístico adjunto: Tony Fabre. Teatro de Madrid, 21 al 30 de mayo de 2004.

Dos estrenos y una pieza de 1988 compusieron el programa presentado esta primavera en Madrid por la Compañía Nacional de Danza 2. El estreno más interesante fue el del emergente coreógrafo Chevi Muraday, titulado Inside, producto de un encargo de la compañía, siempre atenta y sensible a los nuevos creadores. Hemos podido ver ya varios trabajos anteriores de Muraday con su compañía Losdedae. Esta nueva coreografía evoluciona siguiendo las líneas que fue trazando previamente. La personalidad artística de Muraday se consolida en esta última creación, manifestando un estilo propio que tiene como eje la reflexión sobre el ser humano, sobre la soledad, sobre su relación con los demás. Algunos rasgos de su lenguaje son la exploración de la burbuja personal, el contacto, el suelo y los equilibrios, más que los desplazamientos. El vanguardismo está justificado desde una necesidad expresiva que fluye con fuerza e intensidad. El propio coreógrafo tiene una gran fantasía teatral y también firma una escenografía llena de una melancólica belleza. Su trabajo transmite a los jóvenes intérpretes de la Compañía Nacional de Danza 2 una sutil madurez. Las otras dos coreografías de Duato que enmarcaron este estreno incidieron en todo lo contrario, haciendo una exaltación de la alegría de bailar, de la vitalidad y del movimiento. Arenal es una pieza de 1988 inspirada en las canciones de María del Mar Bonet,  en la que la danza se deja llevar por la vitalidad de estas canciones llenas de luz y claridad. L’Amoroso es un estreno basado en la música barroca que Duato ha utilizado en algunos espectáculos recientes y que a mí se me antoja como la reutilización de posibles descartes, que dan como resultado un bello ejercicio coreográfico, interesante desde el punto de vista formativo de la compañía, pero que no aporta nada a la carrera de su autor, que en sus últimas grandes creaciones ha realizado verdaderas obras maestras. Los jóvenes bailarines interpretaron todas las piezas con grandísima perfección y entrega. Ofrecieron, como ya es habitual, un espectáculo de primera calidad en el que todos los elementos técnicos y artísticos estuvieron cuidados al detalle.