TEARS OF BEAUTY

Por Rubén Flórez Bande

La Fundación Non Profit (que es quien produce, junto con Warner España, este interesante disco) nace con el fin de crear nuevas iniciativas para acercar la música clásica a un amplio público, para estimular la sensibilidad hacia la acción social y humanista, la difusión de la música contemporánea ayudando a nuevos compositores, también ejerciendo una labor discográfica, etc. En este caso, Warner entregará todos los beneficios recaudados por la venta de este CD a ONG's como Medicus Mundi, y Médicos Sin Fronteras.

En este disco se incluyen composiciones todas ellas del siglo XX o incluso del XXI, pero puede decirse que la música que se ofrece aquí es apta para todos los públicos, a nadie "molestará" la escucha de este disco. Lo que no está tan claro es que algunas de las piezas incluidas puedan llamarse de "gran repertorio" dentro de este campo. Los protagonistas de este registro, son el violinista (aquí también haciendo las labores de director) armenio, aunque nacido en el Líbano, Ara Malikian, concertino de la Orquesta Sinfónica de Madrid y la Non Profit Music Chamber Orchestra, aparte de intervenciones puntuales de otros instrumentistas de la orquesta.

El disco se abre con la Suite Nº 3 para violín, viola y orquesta de cuerdas del compositor sueco Kurt Atterberg (1887-1974), compositor, cellista, ingeniero eléctrico, director y amdministrador de patentes, este es el amplio currículo de este curioso compositor. La obra que se nos ofrece es de un aroma casi paisajístico, aunque lo que nos viene a narrar de forma sonora es la Sor Beatriz de Maeterlinck. Dividida en tres partes (Prelude, Pantomin y Vision), nos acerca a un compositor que no se desprende del lenguaje heredado de Grieg, aunque se va acercando poco a poco a la figura de Sibelius. Los solistas, Malikian y el violista José Ángel Vélez, planean sensualmente sobre esta partitura tan sutil.

Del ex rockero japonés, y actual compositor de bandas sonoras Shigeru Umebayashi (1951- ) se incluye Yumeji´s Theme que forma parte de la banda sonora de "In the Mood for Love" (Deseando Amar) del director Wong Ka-Wai, una especie de vals triste, algo desgarrado, pero que en su brevedad transmite su algo de desolación, la voz la lleva la melodía llorosa del violín, acompañada con un pizzicato de la cuerda.

Del occidantelizado Umebayashi, nos vamos a un "castizo" inglés, si es que eso puede ser, Michael Hurd (1928-2006). Hurd, en su Sinfonía Concertante no se desprende de los grandes ingleses, por esta breve obra, planea el poder melódico de Elgar, y las miniaturas de Delius: todo tranquilo, todo fluye. Se añora el canto inglés, suplico en este caso por el violín de Malikian. Obra sin pretensiones, interpretación "light"... como la propia obra.

Otro inglés, anterior en el tiempo pero no en los resultados, es Gerald Finzi (1901-1956) uno de los grandes representantes de "las miniaturas inglesas" como pudieron ser Ellis, Binge, Mayerl, Ketelbey... de él se nos incluye la Romanza en Mi bemol para orquesta de cuerdas Op. 11, obra al igual que la de Atterberg, profundamente paisajística, dentro de una estructura clásica. La interpretación de la Non Profit Music Chamber Orchestra es correcta y contemplativa.

Jorge Grundman (1961- ), compositor español, nos presenta su Largo para violín y orquesta de cámara, breve muestra "new age" que no va más allá. Malikian y la orquesta defienden la partitura, puramente melódica. Y también el Trío para cuerdas nº 3, muy cantarín y fácil, sin pretensiones tampoco, pero que recuerda a las melodías infantiles que uno escuchó de niño. Obra serena, que defienden muy bien Malikian, Vélez, otra vez a la viola, y Dragos Balan, al cello.

De más enjundia, y quizá la obra con más cuerpo de toda la selección de este disco, es Frates del compositor estonio Arvo Pärt (1935- ), para cuerdas y percusión, obra neobarroquista con una estructura de "passacaglia" donde el violín "entona" un canto religioso. Obra concentrada, muy bien servida por Malikian y la orquesta, que hacen que esta misma sea la más conseguida de todo el registro, ya que exprime todas las cualidades tímbricas y virtuosísticas de esta orquesta "ad hoc" y del violinista.

La obra más conocida de este disco será el "Nocturno" de El Tábano de Shostakovich (1906-1975), aquí el protagonismo es cedido al joven rumano, cellista también de la Orquesta Sinfónica de Madrid, Dragos Balan, que nos introduce sin miramientos en esta breve, pero delicada, pieza de Shostakovich. Sin ningún divismo, sabiéndose acoplar a la orquesta, pero con voz propia..

Del compositor y cellista inglés, aunque nacionalizado español, David Johnstone (1959- ) nos ofrece Resurrection obra neorromántica para orquesta de cuerdas. Una estructura clásica, y unos efectos clásicos. Música pegadiza, que bien podría encuadrarse en la línea de Finzi, y compañía... pero con unos años de retraso.

Por ultimo, vuelve la banda sonora, en este caso, del compositor español Alberto Iglesias (1952- ) compositor de bandas sonoras de películas de directores como Medem (Vacas, La Ardilla Roja, Tierra, Los amantes del Círculo Polar), Almodóvar (La flor de mi secreto, Carne Trémula, Todo sobre mi madre, Hable con ella..) Meirelles (El Jardinero Fiel, por la que fue nominado al Oscar), etc. En este caso se nos incluye, al igual que la obra de Umebayashi, una especie de brevísimo vals ("Soy Marco") de la película "Hable con ella", donde el violinista vuelve a ser el protagonista en una obra también sin pretensiones, nostálgica, pero que ahí se queda.

Disco, en definitiva, curioso, por lo singular de su elección de obras, y que permite escuchar piezas que de otras forma no nos llegarían. La música es apta para todos los públicos... ahora, que guste o no, ya entra dentro de la elección de cada uno.
 

REFERENCIAS: 


"Tears of Beauty"
Obras de: Atterberg, Umebayashi, Hurd, Finzi, Grundman, Pärt, Shostakovich, Johnstone, Iglesias.
Ara Malikian, violin y dirección
José Ángel Vélez, viola
Dragos Balan, violoncello
Non Profit Music Chamber Orchestra
WEA 5101183462