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       UDO ZIMMERMANN & MUSICA VIVA 5 
        
      Por 
      Justino 
      Losada Gómez 
                
        
      El quinto volumen 
      de la serie Música Viva del sello alemán Col Legno, llega con Pax 
      Questuosa, obra del compositor y director, igualmente alemán, Udo 
      Zimmermann. A pesar de que es poco conocido dentro de nuestras fronteras, 
      deberíamos saber que gran parte de su carrera como compositor está 
      dedicada a la ópera y que una de ellas, Die wundersame Schusterfrau 
      [La zapatera prodigiosa], compuesta en 1981, se basa en textos de Federico 
      Gracia Lorca. Igualmente mantiene una dilatada carrera como director de 
      opera y de repertorio contemporáneo, siendo a su vez director de la serie 
      de conciertos "Musica Viva" de la Bayerischer Rundfunk. 
       
      Cabe decir que el disco es una buena carta de presentación de los 
      quehaceres de este compositor y director, ya que Pax Questuosa 
      emerge como una obra, parca de ideas, pero bien desarrollada por una 
      orquesta divida en bloques funcionales y que muy pocas veces sonarán en 
      conjunto, conformando una estructura coherente al uso de las fuerzas 
      requeridas (solistas, tres coros de cámara y orquesta). La obra, compuesta 
      en 1982 fue un encargo de la Orquesta Filarmónica de Berlín con motivo de 
      su 100 aniversario.  
       
      Conformada en tres partes, Pax Questuosa comienza con un 
      recitativo para cuerdas, que será material recurrente en toda la obra y 
      base para las variaciones posteriores, acompañada después de la sección de 
      vientos, y la percusión en piano, para seguir con una explosión coral 
      ("Exclamatio I"). Aquí los textos de San Francisco de Asís y del poeta 
      polaco recientemente fallecido Czeslaw Milosz forman el mensaje conjunto 
      de la primera parte cantada por los solistas, la belleza del mundo pero a 
      su vez el horror de sus moradores (Milosz), como claro condicionante de la 
      imploración por la paz (San Francisco de Asís). Aquí Zimmermann busca una 
      escalada de tensión, porque no se canta para la paz sino por la búsqueda 
      necesaria de la misma y el muy humano sentimiento de desasosiego al no 
      encontrarla y por eso de esta manera, añade solistas poco a poco, utiliza 
      los dos pianos como instrumentos percusivos, crea un complejo entramado 
      vocal y así pronunciando cada vez más la pendiente, llega a un clímax que 
      desemboca en un pasaje rítmico de percusión y metales. Justo en esta 
      ultima parte, se advierten las claras referencias a la música de 
      compositores de generaciones anteriores. Aquí se puede oír al Henze de 
      Las Basáridas, al Hartmann de la Primera Sinfonía, e incluso 
      en cierto modo, al B.A Zimmermann de su Sinfonía en un movimiento, 
      manteniendo la obra en una clara línea temática que bien pudiera 
      emparentarse con los ejemplos citados, al paisaje sonoro y tapiz expresivo 
      de la obra de Alban Berg. 
       
      La segunda parte ("Implorationes") se divide en varias secciones, donde 
      los solistas y el coro cantan textos de poetas alemanes del siglo XX, 
      entre ellos Wolgang Borchert, Rudol Hagelstange, Else Lasker-Schüller, 
      Marie Luis Kaschnitz, Nelly Sachs y Heinrich Böll. En esta parte la 
      orquesta tiene un papel muy secundario y casi brilla por su ausencia, 
      quedando relegada al mínimo recogimiento, no ya camerístico sino 
      prácticamente instrumental creando pasajes de extrema belleza como el de 
      "Es wird ein großer Stern in meinen Schoß fallen..." texto de Else 
      Lasker-Schüler, cantado por la soprano, el coro y pincelado por las 
      maderas y los pianos. Después vuelven a aparecer los textos de San 
      Francisco de Asís y variaciones del tema de metales y percusión de la cima 
      de la primera parte. En este punto me parece muy curioso el parecido del 
      interludio de las secciones de percusión de metales (Pista 7- 2:00) con el 
      final del Concierto para Orquesta de la compositora polaca 
      Grazyna Bacewicz, ¿homenaje o casualidad? 
       
      En la tercera parte ("Exclamatio II") para coro y orquesta, vuelve a los 
      textos de San Francisco de Asís, creando un canon de solemne majestuosidad 
      y en el que al final, el bajo recita de nuevo versos de Milosz finalizando 
      la obra con un estatismo interrumpido pero no forzado. 
       
      En casos como este, en el que el compositor es el propio director de la 
      obra, no suele haber problemas en torno a criterios interpretativos, 
      máxime si se cuenta con una orquesta puntera en la interpretación de 
      música contemporánea como la Orquesta de la Radio Bávara así como con unos 
      solistas, más que solventes. Zimmermann como director es claro, cuida los 
      planos sonoros, busca dinámicas de contrastes acusados, pianissimos casi 
      imperceptibles y los más sonoros fortissimos, pero todo muy bien medido, 
      sin apelotonamientos. Otro punto a su favor es la extraordinaria toma de 
      sonido, de un concierto en directo en el que parece no existir el público, 
      a juzgar por el educado silencio que guardaban. 
       
      En definitiva, un disco recomendable para quienes quieran escuchar una 
      parte de la obra y las maneras de dirigir de Udo Zimmermann, creador poco 
      conocido, pero que bien pudiera merecer parte de nuestra atención. 
       
       
       
       
      REFERENCIAS: 
       
      UDO ZIMMERMANN: Pax Questuosa 
      Chor des Bayerischen Rundfunks 
      Symphonieorchester des Bayerischen Rundfunks 
      Udo Zimmermann - director 
      Col Legno WWE 1CD 20085 
       
       
      Distribuidor en España: DIVERDI.  
      E-mail: 
      diverdi@diverdi.com 
      Página web: 
      www.diverdi.com 
  
        
        
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