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LOS VIENTOS FRANCESES
Por
Rubén Flórez
Bande
"Los vientos
franceses" es un conjunto instrumental de número variable, formado por
instrumentistas de viento de cierto renombre, liderado por el flautista
Emmanuel Pahud y los hermanos Meyer -Paul y François-, clarinete y oboe
respectivamente. En esta grabación que ahora nos ocupa se les suma el
pianista Eric Le Sage, que suele ser el acompañante habitual en los
recitales de Pahud.
El programa de este CD gira, mayoritariamente, en torno a compositores
franceses, con algún que otro añadido. Las obras más cortas son las que
tienen el carácter más "bailable"; por ejemplo, aquí se incluyen el vals
nº 3 de El retorno de Maxim Op.45 y el vals nº 4 de El
abejorro Op.97a de Shostakovich, en arreglo de Lev Atovmyan, para
piano, clarinete y flauta. Arreglo tremendamente conseguido, ya que da la
sensación de que esta música fue compuesta originariamente para esta
disposición, y donde Pahud y Meyer sacan el máximo partido de sus
instrumentos en tan corto espacio de tiempo.
La otra obra corta y "bailable" es el Chôros nº 2 de Villa-Lobos
para flauta y clarinete, muy sensual, y dulzón, sobre todo la parte del
clarinete, y con dos temas, no contrapuestos, pero sí ciertamente
marcados, de un "exotismo" propio de la música del compositor brasileño.
El resto del CD lo conforman obras de estructura más clásica (en teoría) y
de mayor duración. La obra más interesante de estas es la Sonata
Op.45 para flauta, clarinete, oboe y piano de Milhaud. Interesante sobre
todo el primer y último tiempo (Tranquille y Doloureux) muy nostálgicos,
pero sin perder la elegancia, con cierto sabor a "saudade" brasileña,
tratados como canciones de despedida, donde los instrumentistas de viento,
parecen una misma voz, o un mismo mensaje a transmitir. No hay contrastes
exagerados en la tímbrica, sí algún giro, pero todo se mueve
melódicamente, muy sugerentemente. Estos movimientos extremos contrastan
con los movimientos internos (Joyeux y Emparté) mucho más rítmicos y
extravertidos, más virtuosísticos que líricos, donde los tres solistas
despliegan su color particular y diferente, aquí ya no existe lo
homogéneo. Le Sage guía a los instrumentistas de viento, pero su parte
quizá no esté igual de bien tratada por el compositor que las de sus
compañeros.
Otra obra, también sugerente por lo de "exotismo", es la Sonata
Op. 11 para flauta, clarinete y piano, de Maurice Emmanuel, donde se
mezclan en sus tres movimientos la tímbrica debussystica con ciertos
juegos rítmicos casi expresionistas. Escúchese, si no, el último
movimiento (Molto allegro e leggerisimo) donde en vez de clarinete y
flauta parece que estuvieran tocando mariposas, con una sutileza y efectos
muy gratos, o al menos sorprendentes.
Las dos obras restantes, la Sonatina en trio Op. 85 para flauta,
clarinete y piano de Florent Schmitt y la Sonatina Op. 11 para
flauta y clarinete de André Jolivet, al lado de sus compañeras quizá
resulten más "académicas" o "tradicionales" La obra de Jolivet cuenta con
la ventaja de apreciar el juego tímbrico de clarinete y flauta, sin falta
del soporte armónico del piano; obra muy bien conseguida, pero donde quizá
los temas, no vayan más allá de lo puramente melódico. Algo parecido le
pasa a la Sonatina de Schmitt, muy melódica, con cierto toque
infantil, muy disfrutable... pero que ahí se queda. Eso sí, aquí los
músicos disfrutan como niños auténticos, no puede sonar esta música más
"en su salsa".
Disco recomendable para conocer repertorios nuevos. Más para disfrutar que
para otra cosa. Los intérpretes campan a sus anchas.
REFERENCIAS:
"French Connection" Obras de: Shostakovich, Villa-Lobos, Jolivet,
Milhaud, Emmanuel y Schmitt.
"Los vientos franceses": Emmanuel Pahud: flauta, Paul Meyer: clarinete,
François Meyer: oboe, Eric Le Sage: piano.
EMI 5 57948 2
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